Tamales for Hope es una de las mejores historias de pequeñas empresas de los Quad Cities. Su propietaria, Carmen López, ha superado retos que van mucho más allá de las dificultades típicas del desarrollo de una pequeña empresa.
En 2012, López fue diagnosticada con leucemia linfoblástica aguda, una forma rara de cáncer de la sangre. A pesar del diagnóstico, López estaba decidida a pasar el mayor tiempo posible con su hija y, al mismo tiempo, generar ingresos. Fue entonces cuando decidió que quería convertirse en empresaria.
Empezó a hacer tamales, un plato popular mexicano, para mantener a su familia ofreciéndoselos a amigos y familiares. Poco después, su cáncer entró en remisión y López puso su negocio de tamales en pausa mientras su mejoría de salud le permitía buscar un nuevo trabajo. Pero en 2018, el cáncer reapareció, y de nuevo tuvo que enfrentarse a un reto aparentemente insuperable: mantener a su hija mientras también se sometía a quimioterapia.
López volvió a emprender para convertirse en propietaria de un negocio, y le recomendaron que su primer paso fuera encontrar apoyo en el Centro de Desarrollo de Pequeñas Empresas de Illinois (SBDC) de la Western Illinois University – los Quad Cities (WIU-QC). Gracias a los servicios personalizados y bilingües que se ofrecen en el centro, tuvo la oportunidad de aprender sobre normativa, impuestos sobre las ventas, marketing, registro de empresas, creación de redes y otros elementos relevantes a la hora de poner en marcha y gestionar un negocio.
“El SBDC ha sido un recurso que me ha ayudado a mejorar mi negocio. Me han ayudado con mucha información y han hecho que mi negocio sea más fácil de manejar”, dijo López. “Me ayudaron con todo… hasta con el nombre del negocio… sin su orientación Tamales for Hope no existiría porque no tenía medios para pagar ese tipo de servicio profesional”.
Dijo que el SBDC la ha ayudado a sentirse más segura y decidida en sus esfuerzos por hacer crecer su negocio. Cuando se le preguntó qué consejo le daría a alguien que aspira a ser propietario de un negocio perteneciente a una minoría, López dijo: “Les diría que fueran a la oficina del SBDC en WIU a buscar ayuda porque allí tienen muchos recursos que pueden ayudarles, y son muy amables y serviciales.”
López está agradecida a las demás entidades locales que la apoyaron, entre ellas Global Communities, Catalyst Kitchen y Mercado on Fifth.
En la actualidad, López elabora cientos de tamales cada semana y también ha introducido empanadas rellenas en el menú. Dice: “En el futuro me gustaría tener más restaurantes a los que suministrar y llegar a restaurantes que nunca han vendido tamales”.
La historia de López es una que ilustra perfectamente el espíritu de lucha que los aspirantes a propietarios de negocios deben poseer para tener éxito, y la Cámara de los Quad Cities se enorgullece de asociarse con el SBDC en WIU-QC para asegurar que los empresarios como ella reciban los recursos que necesitan.
Por la QC Chamber of Commerce