La organización de derechos civiles latinos más grande y antigua del país insta al FBI y al Departamento de Justicia a intervenir en el caso y presiona para que se duplique la recompensa a 100.000 dólares por el espantoso asesinato con decapitación y desmembramiento
Washington, DC – La Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC) dice que está poniendo toda la fuerza de la organización en la investigación del asesinato del especialista del ejército Enrique Román-Martínez. LULAC se compromete a no descansar hasta que se sigan todas las pistas y se descubra el total de los hechos en el horrible asesinato del soldado de Chino, California. El miembro del servicio de 21 años desapareció en mayo de 2020 mientras estaba en una excursión de fin de semana del Día de los Caídos en Cape Lookout National Seashore en Carolina del Norte con siete compañeros soldados.
LULAC celebrará una conferencia de prensa el jueves 27 de enero, a las 11:30 AM (PT), en la Plaza Olvera Street, 845 N Alameda St. Los Angeles, CA 90012. Entre los oradores estarán José Barrera, Director de CA LULAC, el abogado Dustin Collier, y Griselda Martínez, hermana de Enrique.
“LULAC espera que este brutal caso de homicidio reciba la máxima atención de las dos principales agencias de investigación de nuestro gobierno federal, nada menos”, dice Domingo García, presidente nacional de LULAC. “Además, la recompensa por la información que conduzca al enjuiciamiento por asesinato debe ser aumentada de 50 mil dólares a 100 mil dólares. A día de hoy, la investigación sobre el asesinato de Enrique ha alcanzado un hito en la búsqueda de justicia. Siete personas se enfrentan ahora a posibles cargos en el asunto. El Ejército ha hecho lo que ha podido, y ahora esperamos que el FBI y el Departamento de Justicia tomen las acciones enérgicas necesarias para que los responsables se enfrenten a las consecuencias de su atroz acto. Agradecemos al abogado Dustin Collier su determinación y su humanidad al asumir este asunto de forma gratuita.
“La familia de Enrique merece la verdad y la justicia, y ha quedado muy claro que el Ejército no puede o no quiere proporcionar ninguna de las dos cosas”, dice Collier. José Barrera, director estatal de LULAC en California, añade: “LULAC exige que el asesino o asesinos de Enrique Martínez sean encontrados y procesados, para que él y su familia obtengan la justicia que merecen. Los siete soldados que estaban con él saben lo que pasó. Es hora de que se realicen esfuerzos enérgicos para identificar a los autores de este asesinato. Fiscal General Garland y Director Wray – es su momento para hacerse cargo de lo que el Ejército ha intentado pero ha fracasado”.
García dice: “El grupo de trabajo militar de LULAC, el mismo equipo que ayudó a impulsar la acción en el asesinato de la especialista del ejército Vanessa Guillen en Ft. Hood, Texas, fue contactado por Griselda Martínez, la hermana de la víctima poco después de su desaparición. Inmediatamente empezaron a trabajar en el caso y se pusieron en contacto con el Ejército de los Estados Unidos para informarles de que LULAC estaba implicada y supervisando las medidas que los investigadores del Ejército estaban tomando para detener y acusar a los responsables. Ese sigue siendo nuestro compromiso, y LULAC no renunciará como no cedió en el caso de Vanessa”.