Por Ryan Magalhães, The Des Moines Register
La Feria Estatal de Iowa fue testigo de un auténtico rodeo mexicano el domingo por la tarde. Charros y Ecaramuza del centro de Iowa actuaron por primera vez en el recinto ferial, en el Elwell Family Park.
El espectáculo fue una demostración de un deporte conocido como Charrería, que se compone de 10 eventos llamados Charreada. Sin embargo, debido a ciertas limitaciones, sólo se mostraron cinco eventos, incluyendo baile, equitación y lazo.
“Actuar en la feria es increíble”, dijo Alejandra Pina, capitana de las Escaramuza Quetzallihas. “La mayoría somos de Iowa, así que es la culminación de muchos sueños”.
La charrería es un deporte originario de México en el que los concursantes deben demostrar sus habilidades con el lazo y el control del caballo. Implica tanto espectáculo como una habilidad técnica cuidadosamente refinada. Aunque el espectáculo del domingo no era de carácter competitivo, Pina dijo que era una buena práctica.
“Las pistas son un poco más pequeñas”, dijo. “Y el terreno es muy diferente. Estamos acostumbrados a superficies blandas y arenosas”. La ayudante de Pina en el equipo, Anna García, dijo que ya se había torcido el tobillo una vez después de la primera exhibición.
El presidente de los clubes Charros de Iowa y locutor del evento, Juan Pina, dijo que estaban “haciendo historia mientras actuamos”. Los Charros llevan 16 años participando en el Desfile de la Feria Estatal, pero es la primera vez que actúan en el recinto.
El espectáculo comenzó con una rutina de baile de Wendy Espinoza, que compartió el ruedo con un caballo que trotaba al ritmo de la música. Una banda en directo amenizó la mayor parte del espectáculo, añadiendo un toque mexicano más al evento.
Después de Espinoza, un charro solitario realizó una serie de maniobras técnicas que incluían múltiples giros de 360 grados seguidos. Algunas de las maniobras se realizaron incluso sin bocado, una herramienta que facilita mucho el control del caballo.
Uno de los momentos más destacados fue la impresionante demostración de habilidad con el lazo de Dariel Delgado, uno de los charros más jóvenes que actuaron. Delgado no sólo lazó a un caballo que iba a toda velocidad, sino que también realizó 40 saltos consecutivos con su lazo, un truco llamado Texas Skip.
El público disfrutó de varios bailes y espectáculos más antes de que el evento llegara a su fin.
Pina dijo que esperaba que el espectáculo pudiera volver el año que viene. García se mostró de acuerdo, calificando el deporte y el espectáculo como una labor de amor.
“Es una forma fantástica de conectar con tus raíces”, afirmó.
El equipo Escaramuza que actuó se puede encontrar en Facebook.