Por Perry Beeman, Iowa Capital Dispatch
El martes siguieron aumentando los indicios de que la variante delta del COVID-19 interrumpirá las clases y los eventos en los próximos meses.
La Federación Laboral del Oeste de Iowa canceló todos sus picnics del Día del Trabajo en Council Bluffs, Fort Dodge y Sioux City debido al creciente número de casos en el estado.
“Las tasas de casos confirmados en los condados de Woodbury y Pottawattamie están entre las más altas del estado, mientras que las tasas de vacunación en ambos condados siguen siendo inferiores al 50% de la población”, informó la federación en un comunicado de prensa.
El presidente de la Federación, Jeff Shudak, dijo que la organización no quería aumentar la amenaza para los niños. Jóvenes estudiantes que no son elegibles para las vacunas y que asistirán a las clases este otoño bajo una prohibición estatal de los mandatos locales de la máscara. La prohibición fue aprobada por la mayoría legislativa republicana y firmada por la gobernadora republicana Kim Reynolds. Los sindicatos han tendido a apoyar a los candidatos demócratas.
“Desafortunadamente, debido a las bajas tasas de vacunación, la falta de mitigación estatal o local, y la propagación de variantes cada vez más contagiosas, las tasas de COVID están aumentando de nuevo”, dijo Shudak en un comunicado. “La junta de la WILF y sus delegados no quieren contribuir a la propagación de este virus en nuestras comunidades, especialmente entre los niños que no pueden ser vacunados. Ya se encuentran con suficientes riesgos en la escuela”.
Retraso de las clases
El distrito escolar de la zona de Avoca, AHSTW, ha anunciado que retrasará el inicio de las clases hasta el 30 de agosto debido a las enfermedades del personal y a la exposición al coronavirus. El inicio de las clases estaba previsto para el martes.
El distrito incluye estudiantes de Avoca, Hancock, Shelby, Tennant y Walnut.
El Des Moines Register informó que 15 superintendentes que participaron en la conferencia telefónica de los Administradores Escolares de Iowa el martes dijeron que no tenían conocimiento de que otros distritos hubieran retrasado las clases. El día anterior, Mike Beranek, presidente de la Asociación de Educación del Estado de Iowa, el sindicato de profesores, dijo al Register que espera que más distritos se enfrenten a decisiones similares a la de Avoca a medida que la variante delta se siga extendiendo.
Las escuelas de Des Moines comienzan las clases en 60 edificios el miércoles con 32,000 estudiantes, dijo el portavoz Phil Roeder. Un total de 1,500 estudiantes tomarán clases en línea a través de un programa de primaria y a través del Campus Virtual del distrito para los grados seis a 12.
En una entrevista, Roeder dijo que el distrito no piensa ignorar la prohibición estatal de los mandatos de mascarilla.
“Iowa, por supuesto, es uno de esos estados que optó por ignorar la ciencia y no permitir que las escuelas requieran mascarillas”, dijo Roeder.
“Dicho esto, hemos estado animando a los estudiantes y al personal por igual a ponerse la mascarilla cada vez que hablamos de este tema. En este momento no hay intención de ignorar la ley del estado, por muy pro-COVID que sea, e imponer nuestro propio mandato de mascarilla no obligatorio”, añadió.
“Desgraciadamente, nuestro estado ha atado las manos a los distritos escolares para que no tomen ni siquiera las medidas más básicas para proteger a la gente de la pandemia, incluidos los alumnos de primaria que aún no tienen edad para recibir la vacuna”, dijo Roeder. “Sí tenemos previsto lanzar un tablero de control en los próximos días para hacer un seguimiento de los casos positivos entre los estudiantes y el personal”.
Reynolds ha dicho en repetidas ocasiones que los padres deben decidir si sus hijos llevan mascarilla en clase.
El distrito de Des Moines cerró su edificio de oficinas administrativas durante la primera semana de clases cuando más del 10% del personal dio positivo por COVID-19. El distrito ha aumentado los intercambios de aire en los edificios y cuenta con 5,000 puestos de desinfección de manos, añadió Roeder.
Se cancela el concierto de Spoon; el espectáculo de Bublé requiere vacunas o pruebas
La banda Spoon canceló un concierto en Des Moines por temor a que muchos asistentes no estuvieran vacunados debido a una nueva ley estatal que prohíbe a los negocios exigir pruebas de vacunas, informó Associated Press. El expediente 889 de la Cámara de Representantes se aprobó después de que los republicanos se opusieran al concepto de “pasaportes de vacunas”.
Sin embargo, el Wells Fargo Arena está exigiendo una prueba de vacunación o una prueba COVID-19 negativa en un plazo de 72 horas para asistir al concierto de Michael Bublé el 17 de septiembre, señala el sitio web del estadio. Los menores de 12 años, que aún no pueden vacunarse, tendrán que mostrar los resultados de las pruebas. Las normas están sujetas a cambios, añade el comunicado.
El director del estadio, Chris Connolly, dijo que él y su personal están respondiendo a las peticiones de los artistas y sus promotores.
“Estamos tratando literalmente con cada artista caso por caso”, dijo Connolly.
Sostuvo que el hecho de que los asistentes al concierto de Bublé puedan hacerse una prueba si no quieren mostrar una prueba de vacunación evita la ley estatal. Un acuerdo similar se utilizará para el concierto de James Taylor/Jackson Browne del 8 de diciembre, dijo Connolly.
Alan Jackson y su equipo no pidieron ningún procedimiento especial de COVID-19 para su espectáculo del 11 de septiembre en el Wells Fargo, por lo que no habrá ninguno, dijo Connolly.
El Wells Fargo Arena sugiere a los asistentes al concierto que lleven mascarillas, pero no las exige. Connolly dijo que todas las reglas de COVID-19 podrían cambiar dependiendo del número de casos y otros factores.
En Iowa se ha producido un gran aumento de casos últimamente. Los datos son irregulares y a veces cuestionables debido a la decisión del estado de actualizar las estadísticas sólo una vez a la semana.
Por ejemplo, el martes, el New York Times informaba de cero casos nuevos, según los informes del estado, durante tres días consecutivos, después de casi 2.200 casos en un solo día la semana pasada. En las últimas semanas, esto ha tendido a significar un retraso en la obtención de datos estatales, más que una lectura real de cero.
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