Por Josie Fischels, Iowa Public Radio
Des Moines, IA-Los residentes de un barrio de Des Moines no tardaron en darse cuenta de que un mural del fallecido líder de los derechos civiles, el diputado John Lewis, con la frase “Black Lives Matter” (“Las vidas de los afroamericanos importan”), había desaparecido del lado de una lavandería donde había permanecido desde 2020.
El mural había sido pintado durante el fin de semana, pero el artista Reuben Cheatem -que ahora vive en Dallas, Texas- no se enteró hasta el lunes, cuando un desconocido se puso en contacto con él para notificárselo a través de Facebook.
“Me hizo saber lo importante que era para la comunidad”, dijo Cheatem, recordando el mensaje de Facebook de la mujer. “No sólo le llamó la atención su ausencia, sino que le pareció lo bastante importante como para ponerse en contacto conmigo, aunque no me conoce”.
La obra de arte, situada anteriormente en University Laundry, en el 1215 de la 6ª avenida, era uno de los varios murales del edificio creados en el marco del Programa de Murales Comunitarios Third Space, que ha instalado arte público por todo Des Moines. Sin embargo, los murales no estaban bajo contrato escrito, y el propietario del edificio, JBD Investments LLC, está pintando sobre ellos en preparación para la venta de la propiedad. IPR se puso en contacto con JBD Investments para solicitar comentarios, pero no obtuvo respuesta.
“Es importante reconocer el momento en que se ha llevado a cabo esta remoción, en un momento increíblemente difícil para tanta gente, especialmente para aquellos que se vieron reflejados en este mural de alguna manera”, escribió en un comunicado Brian Bonanno, Coordinador del Mural del Tercer Espacio. “No puedo enfatizar lo suficiente que la respuesta de Reuben al fallecimiento de John Lewis, y al movimiento Black Lives Matter, tuvo tanto poder. Mientras que la mayoría de nuestros murales aludían a cosas como la diversidad, la equidad y la inclusión, ninguna otra pieza afirmaba más directamente, y más bellamente, para qué y para quién era, que este mural.”
Cheatem dijo que no se le avisó antes de retirar los murales. Aunque no es legalmente necesario que los propietarios del edificio lo hagan, le pareció que era un menosprecio a la comunidad.
“Los murales tienen una cierta temporalidad implícita, por lo que los artistas entienden que están sometidos a los elementos del exterior y… sometidos a la voluntad del propietario del inmueble”, reconoció. “Pero al mismo tiempo, después de cinco años, estoy seguro de que estaban al tanto de la conexión que la comunidad tenía con ese mural […]. Y por eso, sólo como detalle, habría estado bien … que se hubieran puesto en contacto con nosotros para informarnos de sus planes de cubrir todas las obras de arte de esa propiedad”.
Bonanno dijo que espera que, con la ayuda de la ciudad y otros grupos, sea posible localizar un nuevo espacio permanente para que Cheatem pinte un mural “de igual importancia y significado”.
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