Por Andrea May Sahouri, Des Moines Register
Reyes Ortega se dirigía al East High School para recoger a su hija cuando vio los coches de policía.
Primero fueron unos cinco, dijo. Luego siete coches. Luego diez. Siguieron llegando más.
Llamó a su hija, Kemery Ortega, estudiante de último año en East. Ella no contestó. El pánico se apoderó de él.
Una hora más tarde, Reyes Ortega, de 42 años, recibió una llamada de la policía de Des Moines. Ese día, 7 de marzo, se había producido un tiroteo en el estacionamiento norte de la escuela y su hija de 18 años había recibido un disparo en la cabeza.
“Cada vez que pensamos en lo que pasó, empezamos a temblar”, dijo Reyes Ortega el martes fuera del Centro Médico MercyOne.
“Es un miedo por nuestros hijos”, dijo Miriam Montiel Téllez, la madre de Kemery Ortega, con la cabeza recién afeitada. Se la afeitó por su hija, a quien también le afeitaron la cabeza para operarla.
“Ahora no hay paz en mi corazón”, dijo. Y cuando se enteró de la noticia de su hija, ” sentí que iba a morir en ese momento”.
Junto a Kemery Ortega, otra estudiante del Este fue alcanzada por los disparos y permanece hospitalizada. José López-Pérez, de 15 años, que según la policía era el objetivo previsto, murió en el tiroteo.
No sabían si su hija se despertaría, pero entonces se produjo “un milagro”.
Cuando Kemery Ortega fue llevada a cirugía ese lunes, los médicos dijeron que no se veía bien, recordó Montiel Téllez. Y tras la operación, no sabían cuándo -o si- se despertaría.
Pero “Kemery es fuerte, muy muy fuerte”, dijo su padre, Reyes Ortega.
Trece horas después de la operación, Kemery Ortega abrió los ojos, miró a su madre y la saludó, dijo Montiel Téllez.
“Es un verdadero milagro. Así la llaman también aquí las enfermeras y los médicos. Porque lo es”, dijo Montiel Téllez, de 41 años.
“Creo de verdad en el poder de la oración. Toda la comunidad está rezando por ella”, dijo Montiel Téllez. Personas de todo el mundo también se han acercado para apoyar a Kemery Ortega, dijo su madre, y un GoFundMe para apoyar la recuperación de Kemery Ortega había superado los 24,000 dólares el martes.
Kemery Ortega recuerda haber escuchado disparos y a su amiga llamándola por su nombre
Kemery Ortega le dijo a su madre que recuerda estar en un coche con su amiga, esperando que su padre la recogiera de la escuela temprano, dijo Montiel Téllez.
Recuerda haber escuchado disparos, dijo Montiel Téllez. Y lo último que recuerda antes de desmayarse y despertar en el hospital es la voz de su amiga llamándola por su nombre, y las voces de los paramédicos, continuó Montiel Téllez.
Los médicos advirtieron a los padres de Kemery Ortega que podría tener problemas de habla, pérdida de memoria o cambios de personalidad debido a sus lesiones. Pero Montiel Téllez dijo que su hija habla y escribe normalmente, tanto en español como en inglés. Y cuando tiene fuerzas, puede caminar.
Los padres de Kemery Ortega dijeron que a su hija le queda un largo camino para recuperarse por completo, incluida una operación para ponerle una placa de titanio en el cráneo.
Kemery Ortega ha sido intubada dos veces y las secreciones de sus pulmones le dificultan tragar y comer. A partir del martes, sólo puede comer trozos de hielo y beber agua de una cuchara sin la ayuda de una sonda de alimentación, dijo Montiel Téllez, pero la hinchazón de su cerebro está disminuyendo y está mejorando rápidamente.
Una muchacha inteligente, risueña y sonriente
Los padres de Kemery Ortega describen a su hija como dulce, cariñosa, fuerte, trabajadora, inteligente y artística. Es una persona que se preocupa mucho por sus amigos y su familia, dijeron, y siempre está sonriendo y riendo.
También es una “Tomboy”, dijeron: le encanta ir en patineta y ayudar a su padre a arreglar coches.
Y, Kemery Ortega siempre tiene una actitud positiva.
“Sea cual sea la situación, ella va a sacar lo mejor de ella”, dijo Montiel Téllez. “Ella hace eso ahora, incluso con todo el dolor que está pasando – Kemery es una guerrera”.
Dijo que Kemery Ortega sigue sonriendo y riendo. Y no se pregunta “¿por qué a mí?”.
“Ella sabe que está viva y está agradecida por ello”, dijo Montiel Téllez
En cambio, “desea saber por qué lo hicieron”, dijo Montiel Téllez, refiriéndose a los seis adolescentes locales que han sido acusados del tiroteo.
Andrea Sahouri cubre la justicia social para el Des Moines Register. Se puede contactar con ella en [email protected], en Twitter @andreamsahouri, o en el teléfono 515-284-8247.
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